Cristóbal Gómez García tiene 42 años y es tercer finalista de la segunda edición de MasterChef en 2014. Es el actual jefe de cocina de La Chulapa. Este enérgico y creativo andaluz de espíritu inquieto, fue criado en Granada capital y luego afincado en Torrenueva, en la Costa Granadina. Ahí trabajó en el restaurante familiar, Casa Cristóbal, como camarero. Le salieron los dientes detrás de la barra de un restaurante. Actualmente, sigue funcionando como un sitio de cocina tradicional. Se especializa en pescados, cosa normal al estar en primera línea de playa.
Allí no estaba en la cocina, pero estaba deseando entrar.

MasterChef es la oportunidad de poder formarte con los mejores de España como son Pedro Subijana o Dani García. El concurso le ha abierto las puertas para dedicarse a la cocina.
Se diplomó en cocina española en Le Cordon Bleu Madrid, gracias a la beca que recibió por ser finalista de MasterChef, e hizo un curso de especialización en administración, gestión y escandallaje con el Basque Culinary Center.

Estuvo en El Bohío de Pepe Rodríguez, en el catering de Samantha Vallejo-Nágera, en ABaC con Jordi Cruz y en DStage con Diego Guerrero. Se marchó a Ferrol para entrar en A Gabeira del Grupo Nove, un referente en Galicia, con Miguel Ángel Campos. También estuvo asesorando a A Taberna do Cantón del mismo grupo. Llegó a El Alto Restaurante en la Sierra de Madrid, para unirse al equipo de Miguel García.
Todo este viaje empezó al superar el casting del concurso.

Su cocina es gamberra y canalla. Le gusta romper con los moldes e interactuar con el producto, por ejemplo, comiendo con las manos. Eso permite relajarnos y conocer mejor las texturas de los alimentos que comemos. Le gusta sorprender con texturas y sabores diferentes a lo esperado. Así disfrutamos de una experiencia divertida. La cocina tiene que tener un poco de chispa y de rock and roll, pero sobre todo tiene que tener mucho sabor. Así es la cocina de La Chulapa: combinación de lo tradicional y lo irreverente.